El tamarindo es el fruto del árbol Taniarindus indica que llega a crecer hasta los 20 metros de altura. Se cree que es originario de Asia aunque crece alrededor de todo el mundo en zonas de clima cálido. Las propiedades del tamarindo son útiles para mejorar algunos problemas de salud.
Con el tamarindo se preparan bebidas que son muy refrescantes. En zonas desérticas se suele llevar tamarindos para viajes a través del desierto. Es un fruto que ejerce un fuerte efecto laxante, uno de los laxantes más efectivos se preparan haciendo una infusión de unos 20 a 60 gramos de tamarindos en 300 a 400 ml de agua.
Es muy recomendable para combatir el estreñimiento. También se utiliza el tamarindo para la difteria, en forma de gargarismo. Para actuar contra la fiebre, la indigestión, disentería y empacho se disuelve la pulpa de tamarindo en agua caliente y se bebe poco a poco. Para esto usamos 15 gramos de pulpa de tamarindo con sus semillas en medio litro de agua hirviendo.
En algunas regiones orientales se utiliza el tamarindo para combatir la lepra. Para esto se deja macerar 100 gramos de pulpa de tamarindo en un litro de vino de uvas durante ocho días, se cuela y se toman unas 3 copas por día.
En pequeñas dosis se emplea el tamarindo para combatir la irritación de las mucosas digestivas, es especialmente indicada para estos casos ya que a diferencia de otros purgantes no provocan irritación. Con dosis más elevadas se obtiene un efecto laxante suave. Dependiendo de cada persona, puede resultar un laxante inmejorable.
Es un fruto muy refrescante y atemperante del tubo digestivo, se preparan muchos platos con tamarindos aunque se utiliza mayormente para elaborar bebidas refrescantes que son digestivas y muy sabrosas.
Las hojas del tamarindo son astringentes y están indicadas para el gargarismo y para inflamaciones externas.
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