El drenaje linfático facial es una técnica de terapia manual que mediante masajes faciales, activa el sistema linfático responsable de recolectar las macro moléculas adiposas que se acumulan en los tejidos, para ser llevadas por la sangre hacia su eliminación por vías naturales.
Es una terapia que resulta muy buena para mejorar las bolsas en los ojos, reducir ojeras y edema de rostro ya sean por cansancio o por reacción post operatoria. Esta técnica de drenaje linfático facial es ideal para hacer desaparecer el cansancio de nuestra cara, logrando tener un aspecto fresco y renovado.
Se realizan masajes con movimientos enérgicos y circulares a nivel epidérmico. Es totalmente indoloro y no tiene efectos secundarios, se busca deshacerse de la grasa y de los materiales de desecho que pueden acumularse y dan lugar principalmente a edemas y celulitis.
El drenaje linfático no puede ser realizado por cualquier persona, debe ser un masajista profesional o alguien calificado que conozca los puntos de drenaje y la forma correcta de dar los masajes. En caso de un masaje mal dado sí pueden existir algunas contraindicaciones.
Se suele acompañar una sesión de masaje linfático con aceites especiales para este tipo de masaje, aceites para masajes con algún aceite esencial vegetal con propiedades medicinales que pueden ayudar a eliminar los depósitos de grasa acumulados.
Estas técnicas de masaje linfático facial son muy relajantes para el paciente. Actúa como relajante del sistema nervioso, por lo que también es recomendado en casos de estrés y ansiedad. Es ideal para combatir el acné, la caída del cabello, eczema, edemas en las piernas, prevención de estrías, celulitis, flaccidez y muchas otras afecciones.
Además, si decidimos tomar unas sesiones de masaje linfático, veremos como nuestro rostro se siente renovado y saludable lo cual se notará en la piel, puede hacer desaparecer pequeñas arrugas e imperfecciones de la piel luego de varias sesiones.
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